Colombo

 

SABIAS QUE:

Primos de las iguanas, los camaleones son conocidos por su capacidad innata
para cambiar casi instantáneamente el color de su piel, pero no solo para
confundirse con el medio, sino también debido a otros aspectos como estados de
ánimo, cortejo, rechazo, miedo, temperatura… Esta característica lo ha convertido
en un perito en disfrace y en una de las mascotas exóticas más solicitadas. Este
reptil es de los más primitivos, y se cree que hace unos 200 millones de años que
habita la tierra. Existen unas 85 especies distintas de camaleones derivados de la
misma familia científica - Chameleo. Por su condición de endémicos (propio y
exclusivo de determinadas regiones) son mayoritariamente originarios de África
(sobretodo de la isla de Madagascar y el sur oriental) y algunas zonas aisladas de
Asia. En Europa, sólo se encuentran camaleones en la Península Ibérica, dónde
fueron introducidas algunas colonias en el sur de Portugal y en algunas regiones
de España (dónde su caza es ilegal y está penada).

CARACTERISTICAS:

El Camaleón posee tres características principales: cada ojo se mueve con
independencia uno del otro y en todas las direcciones; posee una cola prensil, con
la que se cuelga de las ramas (como si fuera una pata más); y la facilidad de
cambiar de color adaptándose al color del entorno dónde se encuentra. Su mejor
arma de defensa es esta capacidad para el camuflaje, que le permite protegerse
de los potenciales predadores y disfrazarse para que llegue a sus presas sin que
estas se aperciban. Además de ser un buen estratega en la defensa, su pericia
para el ataque es mejor aún pues llegado el momento de cazar, el camaleón se
queda inmóvil. Su cola lo ayuda ya que le brinda mayor equilibrio porque la utiliza
como una quinta pata. Sus ojos son giratorios y esto le permite observar todo
alrededor sin tener que moverse para nada. Y, aunque no sea algo único del
camaleón, lo más popular es su peculiar manera de cazar. Sus ojos y su lengua
(proyectil mortífero que golpea a la víctima con su extremo, con un porcentaje de
acierto casi infalible y en décimas de segundo) desarrollan un arma letal. Tiene un
aspecto extraño, algunos poseen crestas y otros dentro de su especie poseen tres
temibles cuernos. El tamaño de los camaleones varía en función de su raza. El
camaleón típico posee un tamaño medio, pero podemos encontrar desde el
gigante de la familia, el macho de Furcifer Oustaleti, que llega a los 80
centímetros, hasta el diminuto camaleón de bolsillo, el Brookesia Mínima, que no
mide más que unos dos o tres centímetros. Su cabeza describe una forma
triangular mientras que su cuerpo está cubierto de escamas de piel dura. Tiene el
cuerpo arqueado, aplanado por los lados, aspecto que le confiere aspecto de hoja
a la hora de ocultarse y le permite equilibrarse. Sus extremidades son largas y
delgadas. Sus dedos, únicos en los reptiles, son prensiles, es decir, que sirven
para coger, al igual que la cola en los monos o la trompa en los elefantes, son una
especie de tenazas que permiten al animal aferrarse firmemente a las ramas. Los
dedos están divididos en dos partes (2/3), dos por fuera y tres por dentro, dando la
sensación de que poseen manos. Su cola también es prensil, como la de algunos
monos, lo que le permite descolgarse sin ningún problema sin hacer uso de las
patas. La usa como si de un quinto miembro se tratara para desplazarse por
árboles y arbustos, siendo capaz de mantenerse asido tan sólo por ella; mientras
que cuando está en reposo, la mantiene a menudo enrollada en espiral. Dentro
de su anatomía destacan los ojos saltones, muy prominentes, que se alojan a
ambos lados de la cabeza, que pueden moverse con independencia uno de otro y
en todas las direcciones (visión estereoscópica). Esto es gracias a una torreta
membranosa que le permite tener una visión de 360 grados y que le facilita una
visión excepcional para la defensa y caza de sus víctimas. La lengua se
encuentra replegada en una cavidad que posee a modo de bolsa en la parte
inferior de la boca, es larga, y no es bífida, como en la mayor parte de los lagartos,
sino que adopta la forma de una catapulta. Su lengua pegajosa mide dos veces el
largo de su cuerpo, con lo que ésta oscila entre 30 y 60 centímetros y puede
proyectarse con enorme precisión y rapidez a una distancia superior a la longitud
de la cabeza y el tronco del animal juntos. Es una especie de mazo
perpetuamente pegajoso, en el 95 % de las ocasiones que le permite atrapar a sus
presas. El color de fondo es inusitadamente variable y lo pueden cambiar a
voluntad; de tal forma, se dan individuos de color verde, amarillento, pardo, e
incluso azulado o exageradamente negro. Junto al color imperante, siempre
aparecen una serie de ocelos o máculas, unas de color blanquecino y otras de
tonos más oscuros. En todos los casos, las variaciones del color son fiel testigo
del estado anímico, de factores ambientales, e incluso del rango que ocupa cada
individuo con respecto a sus congéneres; dichos cambios se llevan a cabo gracias
a unas células que poseen en la piel denominadas cromatóforos. El cambio de
color tiene lugar cuando las células cromáticas se dilatan o se contraen regulando
los reflejos producidos por cada una de sus capas.

TEMPERAMENTO:

Es quizás el reptil más perezoso. El camaleón es tranquilo, de lento caminar y
movimientos acompasados. Las raras veces que se desplaza por el suelo, lo hace
de forma muy lenta y con la cola levantada. Cada cierto tiempo sacude todo su
cuerpo como si quisiera asegurarse de que se encuentra realmente firme en la
rama. Posee costumbres totalmente diurnas y arborícolas. De carácter poco
sociable, solitario por naturaleza; sólo busca compañía en el período de
apareamiento. Los machos, y a veces las hembras, dominan un territorio, que
defienden celosamente contra otros individuos.
En los primeros tiempos en cautiverio, el camaleón se muestra bastante nervioso,
pero nunca lo suficiente como para morder. Los machos, que suelen ser más
coloridos y con ornamentaciones más prominentes en la cabeza, deben ser
mantenidos en espacios separados. Su marcada territorialidad les empuja a ser
agresivos, y no sólo con su especie, sino con su amo, que deberá mostrar
confianza poco a poco para evitar mordiscos y, con el tiempo, subirá por sus
hombros.

TERRARIO:

Al camaleón le gusta vivir en las dunas costeras y demás lugares secos cercanos
al mar, trepando por retamas, pinos, sabinas, enebros, eucaliptos y árboles de
cultivo en general. Así, como mascota, los camaleones deben ubicarse en un
terrario (no en un habitáculo de cristal ni un acuario), el cual, deberá ser más alto
que ancho puesto que sufren problemas de ansiedad si es al contrario. Podemos
encontrar un terrario en tiendas pero se puede construir al camaleón su propio
terrario. La malla metálica es el material más indicado. Una posibilidad es adaptar
una jaula forrándola con malla de mosquitero de agujero grande o de nylon.
También es fundamental que este terrario se sitúe cerca de una ventana, pero
resguardado de la corriente, para que el camaleón no tenga problemas
respiratorios y pueda recibir el sol, un elemento imprescindible para su salud. El
camaleón necesita un apoyo extra de luz para que le proporcione una temperatura
cálida. Esta fuente de calor la conseguimos con un fluorescente. La temperatura
ideal para mantenerlos va de 20º a 32ºC dependiendo de la especie. Al llegar la
noche, el camaleón estará más cómodo si bajamos los grados del terrario en unos
6 puntos ya que la misma temperatura constante día y noche es también uno de
los motivos por los que puede llegar a estresarse. Los camaleones reaccionan
acoplando el color de su piel al fondo al margen del color del mismo. Así, hay que
evitar el exceso de tonos blancos y rojos. El reptil puede estresarse hasta fallecer
si está continuamente sometido a las tonalidades rojizas puesto que no puede
metabolizarlas. La vegetación dentro del terrario es absolutamente indispensable.
Deberá ser natural para una mejor purificación del aire y tendrá que estar
fuertemente sujeta para que el camaleón pueda trepar tranquilamente. Se
recomiendan plantas con más ramas seguras y fuertes que hojas, como los
ejemplares de sheflera y de ficus. Se puede cubrir el suelo del terrario con sustrato
orgánico o con simple papel de periódico.

ALIMENTACION:

Es un insectívoro y al camaleón le gusta una alimentación variada. Los insectos
son la base de su dieta y se pueden comprar en tiendas de animales donde son
criados y están controlados (los insectos recogidos en el exterior pueden ser
venenosos). Los insectos tendrán que permanecer dentro de un recipiente en el
terrario para que el camaleón pueda cogerlos. Le encantan los grillos, langostas,
polillas, cucarachas y gusanos. Hay camaleones que, por su gran tamaño,
engullen pájaros y ratones.

Frutas como la manzana y la pera son una buena fuente de vitaminas y suponen
una excelente combinación con su alimentación habitual. Los camaleones piden
un aporte adicional de vitaminas y de calcio para sus huesos. En las tiendas hay
ambos productos en polvo y solo hay que espolvorearlo en su comida habitual. El
calcio, se administrará tres días a la semana y las vitaminas, cada dos semanas.
De beber hay que darle agua pero por un sistema de goteo, con la ayuda de un
pulverizador un par de veces al día por encima del terrario.

CUIDADOS Y CURIOSIDADES:

Un camaleón criado en cautividad tiene una esperanza de vida estimada de cinco
años. Un camaleón sano tendrá los ojos saltones, nunca hundidos. Por otro lado,
observaremos el movimiento de sus extremidades y el de su cola. El camaleón se
mueve con lentitud, así que el hecho de estar mucho tiempo quieto no es motivo
de alarma.

Existen muchas especies de camaleones, sin embargo, los que se encuentran
más comúnmente son: Camaleón Jackson, Camaleón de Vela, Camaleón Parsons
y Camaleón Pantera.

Algunos camaleones adquieren una coloración pálida, blancuzca, durante el
sueño. Esto permite descubrirlos fácilmente entre el oscuro ramaje donde durante
el día su color les protegería. La época de celo se extiende desde Julio hasta
Septiembre, tornándose durante este tiempo muy agresivos los machos para con
sus congéneres, especialmente a la hora de cortejar a las hembras. Para la cópula
mantienen inmóvil a la hembra merced a un incruento mordisco en el dorso o en el
vientre. Durante la copulación, los huevos son fecundados en el interior de la
hembra y luego al final del verano los huevos son depositados junto a la base de
un árbol y tapados con tierra. Es un número de huevos que oscila entre 6 y 24.
Estos son blancos, gomosos, elípticos y rara vez quedan adheridos unos a otros.
Después de esto la hembra los abandona. Cuando llega la primavera ya están
listos para salir. Las crías, completamente desarrolladas, nacen dentro de la
membrana del huevo; se liberan de ésta así que nacen y empiezan su vida
independiente. El recién nacido parece un adulto en miniatura ya que posee las
mismas características físicas que el adulto y no necesita la guía de los padres
para convertirse en un experto cazador. Los principales enemigos del camaleón
son la depredación de la que es objeto por parte de determinadas aves y
roedores, la perdida de hábitat como consecuencia de la construcción en zonas en
las que este animal siempre ha vivido, y los atropellos durante la reproducción,
que coincide con la época veraniega. Adquirir uno de estos reptiles requiere
cuidado, puesto que se trata de un animal de importación. Tenemos que estar muy
seguros de su procedencia y de las condiciones de compra. Hay que exigir todas
las garantías sobre su procedencia e inexistencia de enfermedades. Lo mejor para
no equivocarse, es acudir a un criador especializado, ya que los camaleones son
delicados y debemos dejarnos asesorar por un profesional.

 

 

Cortesía,

JAIRO HDO BENITEZ
…THe GeCKO DePOT Co…